En el camino que va desde Monzón a la Ermita de la Virgen de la Alegría, y poco antes de llegar a las rampas asfaltadas que suben hasta la iglesia, nos encontramos este peñasco conocido popularmente como "Peña Cascabel".
Nuestro amigo, Eugenio Monesma, comenta: Se trata de una roca aislada, con cazoletas en su extremo superior bastante erosionadas, en la que no se aprecian cruces de cristianización del lugar, por su morfología y tradición, podría ser una piedra fecundante al ser utilizada por las mujeres en busca de la fertilidad con el frotamiento de su cuerpo.
Por su parte, Castillón Cortada, en su obra el "Castillo de Monzón" dice de esta piedra: Todas las generaciones monzonesas al acudir de romería a la Ermita de la Alegría, suelen hacer un alto en el camino y junto a la piedra, preferentemente las muchachas, aplican su oído, y aseguran percibir el tañido de un cascabel o campanilla, que no es otra que la ilusión de obtener novio, o si es casada, la fecundidad. Al mismo tiempo que realizan esta petición, dejan sobre la roca romero y otras hierbas que van recogiendo en el camino.
En cualquier caso una leyenda o tradición, como otras muchas de antaño, que han caído en el olvido con el paso de los años y que de vez en cuando no está mal recordarla.
La Arqueopatrulla
A continuación adjuntamos diversas fotografías de la "Peña Cascabel" que se encuentra en el Camino de la Alegría, lugar muy frecuentado no solo para ir de romería, sino que también es utilizado a menudo por personas que van a pasear, a hacer deporte o a estar en contacto con la naturaleza.