domingo, 25 de febrero de 2018

LA TORRAZA (Binaced) - Época musulmana (1)


Etimológicamente hablando, BINACED, se deriva de dos palabras árabes, IBN-al-ZAYD, que posiblemente era el nombre de  la persona dueña  de estas tierras, las cuales debieron ser conquistadas  por Sancho Ramírez, con su hijo Pedro I, en el año 1089, tras la toma del Castillo de Monzón.

Los siguientes años fueron convulsos y cayeron nuevamente en manos sarracenas, hasta que Ramón Berenguer IV, reconquista todo el territorio en 1149.

Además, en el Archivo de la Corona de Aragón, aparece por primera vez el  nombre de Binaced como BENEZEIDE, de la misma manera que se nombra también a: CASTILLON DE CARBONERES, FACHARON, PINIS, VALFARTA o MATAS, términos que han llegado hasta nuestros días.

Una de las construcciones más significativas de nuestra localidad de la época mulsulmana es LA TORRAZA que, en el Libro de Castillos de Aragón, Guitart C., describe de la siguiente manera:

“La Torraza de Binaced es, junto a la torre de Santa Quiteria en Fraga, única en Huesca dada su técnica de construcción. La Torraza está situada sobre un altozano en la carretera Albalate de Cinca-Esplús, sobre una curva. El castillo está construido con tabiya sobre basamento de piedra, datando de una ordenación militar musulmana fortificando el valle del Cinca para dificultar el avance cristiano hacia las ciudades de Fraga y Lérida. La torre era rectangular armada con arcillas prensadas y capas de arenisca con cimientos macizos de sillares de arenisca alargados, sobre los que se montaron las paredes de tapial. En la actualidad ha perdido en su totalidad dos muros, el norte y el este, encontrándose los que quedan en pie muy rebajados en altura, con los agujeros de los mechinales. La Torraza en Binaced está incluida dentro de la relación de castillos considerados Bienes de Interés Cultural, en virtud de lo dispuesto en la disposición adicional segunda, de la Ley 3/1999, de 10 de marzo, del Patrimonio Cultural Aragonés. Este listado fue publicado en el Boletín Oficial de Aragón, del día 22 de mayo de 2006”.


Por su parte, Adolfo Castán, experto en este tipo de construcciones defensivas y concretamente en su libro Torres y castillos del Alto Aragón, comenta:

“Los despojos del castillo son de gran importancia por haberse construido con tabiya sobre basamento de piedra que la pone en relación con el fragatino Pilaret de Santa Quiteria. Son las dos únicas torres que utilizan esta técnica dentro de la provincia de Huesca. Bien representada en la geografía peninsular: castillo de Hormaza en Burgos, Enciso en la Rioja, Alguaire en Lérida, Castel de Almizra en Alicante o Kant-Hisn en Alcolea (Córdoba)...
No conocemos ninguna atención divulgativa, es por tanto inédita, tal vez por la escasa entidad material del elemento que ha perdido en su totalidad los paños, norte y este, y sustancial merma de los paramentos oeste y sur, con desarrollo máximo de unos 3 m en el presente. Su imagen transmite la sensación de huesos descarnados con numerosos agujeros a modo de cuentas orbitales que miran desde un vacío de siglos.
Si el componente material, su arquitectura, es de alto valor testimonial, no lo es menos su sentido histórico que reafirma el esfuerzo de ordenación militar  musulmán fortificando el bajo valle del Cinca para dificultar el avance cristiano hacia las ciudades de Fraga y Lérida. En el orden cronológico este tipo de torres podrían sustituir a las que se construyeron en el distrito de Huesca durante los ss. X-XI, elaboradas con sillería atizonada: muralla de Huesca, Piracés, Iglesieta de Usón, Alberuela de Tubo, Torreta de los Moros (Peralta de Alcofea)… Ha de ser del x. XI y sin duda habría más, unas pendientes de localizar, otras arrasadas por la acción de la lluvia y el viento sobre paredes de tierra amasadas con grava menuda.
La torre era rectangular, asentada en el labio de una planicie armada con arcillas prensadas y manto de arenisca. El espacio interior era de unos 7 m por 3,50 m, con superficie útil de aproximadamente 23 m2, semejante por tanto en tamaño al Pilaret de Santa Quiteria. Como cimientos se dispuso un basamento macizo de sillares alargados a ras de tierra y sobre ellos se montaron las paredes de tapial. Estos sillares son de arenisca, mayoritariamente atizonados en el frente meridional que es el único visible y están cosidos con yeso blanco que da un tono similar al de la argamasa. Es yeso diferente al de las fortificaciones de Calasanz o Estada de color rosáceo y compacto. Aquí en La Torraza la mezcla es grosera, incorporando trocitos de yeso natural en lugar de grava. Ninguno de los sillares se puede medir completamente, en el frente atizonado va de 47 a 54 cm de lado. Componiendo hiladas de unos 50 cm de altura. El lecho o parrilla de sillares parece de configuración semejante al de la esquina noroccidental de Alberuela de Tubo, con piezas contrapuestas por sus lados cortos.
El tapial sube desde abajo, sin podio pétreo como tiene el Pilaret. En el paño se advierten tres tongadas de entre 0,90 y 1 m de altura –distancia entre centros del mechinal-, con separación de las viguetas que sostenían el cajón para encofrar comprendida entre 0,32-1,10 m. El número de mechinales a occidente es: 9 en la primera hilada, 8 en la segunda y 7 en la tercera. El espesor mural es de 0,90-0,95 m, apreciándose en ambas superficies juntas de discontinuidad de las cajas, así como los cabeceros de piedra, cuando no se han perdido, que cubrieron la viga de madera para evitar que el tapial se adhiriera, impidiendo la extracción después de un secado sumario. En el paramento sur con 12 mechinales, 4 por nivel. Lo normal es que las paredes se enlucieran por dentro y fuera, taponando mechinales, por la delgada película arcillosa ha sido barrida por la intemperie.
No localizamos, al contrario que en El Pilaret, señales de poblamiento a su alrededor, tampoco vano alguno de observación o defensa que pudieron acomodarse exclusivamente en el piso superior. Asimismo ignoramos el número de plantas, situación de la puerta, sistema de cubrición…
Hace unos años se descubrieron a su lado dos cías, actualmente colmatadas. En una de ellas apareció una moneda musulmana de plata; es cuadrada y de cronología tardía al parecer del siglo XII.
A finales del siglo XI,   -1094- la frontera cristiana se perfilaba por tierras de Zaidín, distante ya de Esplús-Albalate, por tanto La Torraza ya habría pasado a manos de Pedro I que asediaba Tamarite de Litera en 1104, año de su muerte”.
                                                                                                                                                                                                            La Arqueopatrulla

Imagen comparativa de la Torraza, entre los años 1994 y 2017

Santi en el interior de la torre. Foto 2017


Está construida de tabiya sobre basamiento de piedra, y en la actualidad, solo le quedan dos muros, oeste y sur. Foto 2017

La palabra tapial proviene de tabiya (nombre árabe), que hace referencia a una técnica de construcción característica de aquella época­



Entre Santi y Daniel, Mariano y Silvia, quienes nos acompañan, siempre que su agenda se lo permite. Foto 2017

El espesor de los muros era de casi un metro, y en su interior disponía de un espacio de 7 m x 3,50 m, unos 23 m2  útiles aproximadamente. Foto 2017

Clara y Duna junto a la pared oeste, donde se aprecian los mechinales. Foto 2017

Imagen de la Torraza con el Cotiella nevado al fondo. Tampoco sabemos el número de plantas que tenía, la situación de la puerta, ni el sistema que usaron de cubierta. Foto 2017

La lluvia no impidió a Lizer, Adrián e Iván , visitar la fortificación. Foto 2017

Imagen tomada desde el SE, donde se aprecia el deterioro que sufre. Desgraciadamente, si nadie lo remedia, desaparecerá por completo. Foto 2017




Lámina de David Alamán

La imagen de Santi haciendo una foto, nos vale como referencia para comprobar, que el muro tiene una altura aproximada de tres metros. Foto 2017

Desde cualquier punto que se mire, es obligatorio pararse a contemplar esta maravilla de construcción. Foto 2017

Mientras Monesma y Baringo intercambian opiniones sobre la Torraza, David, con su habitual gorro rojo, escucha atentamente. Foto 2017


Como torre de vigilancia, estaba ubicada en punto estratégico, desde el cual se podía observar perfectamente una extensa superficie de terreno a su alrededor. Foto 2017


Fragmentos de cerámica gris que aparecen por la superficie. Foto 2015

Muy cerca de la Torraza existe una paridera abandonada y junto a ella, un interesante horno de cal. Foto 2017


Una fotografía de "LA TORRAZA", de Daniel Irigaray, consiguió el premio Accésit del XXVI Concurso Fotográfico Santa Bárbara en 2017. Dicha imagen también fue elegida por CEHIMO, para convocar la XXX BECA DE INVESTIGACIÓN  "Joaquín y Mariano Pano" 2018





domingo, 18 de febrero de 2018

ÉPOCA ROMANA (Binaced)


En la época romana, sus principales ciudades se unen por medio de calzadas, como pudo ser “La vía Augusta", que iba de Tarragona (Tarraco) a Zaragoza (Caesaraugusta), pasando por Lérida (Ilerda), Esplús (Mendiculeia), Monzón (Tolous) y Huesca (Osca). Obligatoriamente tuvo que pasar por Binaced, como lo demuestra el miliario romano  encontrado en el camino de  Esplus.

Otra vía secundaria, unía Fraga (Gallica Flavia), con el Pirineo, pasando por la Puebla de Castro (Labitolosa), discurría por la margen izquierda del Cinca, (al parecer este  nombre proviene de CINGA, nombrado así por Julio Cesar, en su relato de la guerra civil). Uno de sus ramales atravesaba  Binaced, como lo demuestran los restos de la calzada y el pontón que aún existe en el paraje de la Mora.

Joaquin Sanz, en su artículo de la revista AVIARA, de 22 de diciembre de 2003, incluye un tercer ramal comercial por esta zona,  que uniría Mendiculeia con Ripol, siendo su trazado por la actual carretera de Albalate, hasta conectar con el tramo de Fraga a la Puebla.

Sin duda, un lugar de interés de este período, se encuentra en la ladera oeste del poblado de Ripol, donde han aparecido materiales de bronce y plomo, monedas de las cecas de bolskan, Celse, Cese e Iltirta, glandes, anillos, fíbulas, pesas de telar además de cerámica sigillata, campaniense, gris común, e ibérica. Según Poza y Delgado, el material encontrado, evidencia la posibilidad de que existió en ese lugar una mansión romana, parecida a la de Tolous.  Seguramente, tras la decadencia romana del siglo III d. C. florecen las Villas como centro político-económico-militar, así lo acreditan: Villa Fortunatus en Fraga, la del Adamil en Monzón,  la de Mendiculeia o la de Estadilla, las cuales serán saqueadas en el siglo V, por las incursiones bárbaras en esta tierra.

En el cerro de la Parra también aparecen vestigios romanos de gran importancia.

Cronología: En el Valle del Ebro, la construcción de caminos debió producirse a comienzos del siglo II a. C., cuando todo el Valle se verá inmerso en las guerras celtibéricas, hasta siglo V d.C., con la aparición de los pueblos bárbaros, momento en que los visigodos se establecen en la península y sustituyen a la autoridad de Roma.
Actividad: Los muchos restos de ánforas, la cerámica de importación  y las monedas encontradas, ponen de manifiesto la producción y comercialización de vino, trigo y aceite de la zona.


MILIARIO

García y Bellido, en su informe acerca de un miliario romano, hallado en 1956 en Binaced, manifiesta:
“El día 1 de marzo de 1956, el vecino de Binaced, José Gistau Herbera, al efectuar trabajos de nivelación en su finca, sita en la partida de la Torredella, junto al camino de Esplús, encontró una gran piedra cilíndrica, con basamiento cuadrangular y con inscripciones. Una vez identificada, se pudo comprobar que se trataba de un miliario romano, perfectamente conservado, que correspondía a la milla CCLV de la vía miliar romana,  de Tarracone a Legio VII Gemina”.
Dicho miliario en la actualidad se encuentra en la Finca Monte Casasnovas, lamentablemente, muy deteriorado.
Haz click aquí para ver el Informe del Miliario Romano


Portada del informe sobre el Miliario Romano encontrado en la Partida de la Torredella, junto al Camino de Esplús  en el término de Binaced


Fotografía del Miliario que aparece en el Informe de A. García y Bellido  realizada en el año 1956

Primera imagen que hemos localizado donde aparece el miliario con personas.
No coinciden las fechas, en el informe de A. García y Bellido, dice que se encontró en 1956 y en esta foto del libro "Recuerdos y fotografías de Binaced y Valcarca, de M. Castillo, se data de 1950, pero la consideramos un documento de sumo interés



Hace unos años, el Ayuntamiento de Castejón del Puente, hizo una réplica exacta del Miliario de Binaced, que se puede ver en el Centro de Interpretación de la mencionada localidad

Plano a 1:50.000, que aparece en el libro de la Historia de Binaced,  escrito por Ignacio Español

Foto analógica de un tramo de la Calzada de Binaced (1982)

Estado actual de la Calzada Romana de Binaced en el paraje de la Mora


Detalle del empedrado de la calzada


Lizer ayuda a Santi y David, a realizar las mediciones del tramo de Calzada romana de Larredan

E. Sánchez, en un artículo en el País manifiesta que la actual red de carreteras de España, coincide con el trazado de las calzadas, ya que los romanos supieron elegir los mejores corredores, para salvar la complicada orografía de la península

David limpia una de las muchas cruces que aparecen talladas en esa zona, y Lizer, sigue con atención toda la maniobra
David señalada el cerro de la Alegría, de donde provenía en línea recta, la Calzada hasta Binaced

Santi y Lizer de regreso a casa por otro tramo de Calzada, en la que se aprecia cómo los carros dejaron marcadas las roderas de tanto pasar por encima de la roca


Foto analógica del Pontón  (1986)


Foto analógica a finales de los años 80, con los hermanos Ordín, en una visita por la Mora

Jorge (Ayuntamiento) y Ruben (Ibercaja), en una visita al Pontón en el año 2009

Jorge, Secretario del Ayuntamiento, bajo el Pontón. Esta imagen sirve como referencia ya que se observa perfectamente la luz del vano y la altura del arco



En el Camino de Valcarca, existe una plataforma realizada con sillares de gran tamaño, que podría haber sido utilizada para subir y bajar de los carros y de los caballos en aquella época. Foto analógica años 80

Pesas de telar romanas realizadas con barro cocido
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)


Bases de ánforas romanas
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)




Monedas romanas
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa el "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)


Fragmentos de terra sigillata y lamparitas de aceite para iluminar
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)



Objetos de metal que empleaban los romanos
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)


Frascos de cristal, seguramente para perfumes o esencias
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)



Plaquita de bronce con una inscripción latina "VENTALIS NON EST", que se podría traducir como esclavo que no está a la venta
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)


Cartel informativo de la época romana, empleado en la exposición arqueológica realizada en el año 2013 en Binaced. 


La Arqueopatrulla






domingo, 11 de febrero de 2018

POBLADO IBÉRICO DE RIPOL (Binaced)


Se encuentra en el término municipal de Binaced, al final de la carretera de la Huerta que conduce a Albalate de Cinca, junto a la acequia de la Ribera.  Está enclavado en lo alto de un cerro, tiene una superficie de 2800 m2, y está rodeado de una gruesa muralla, construida con piedra de rio.

Se han llevado a cabo dos campañas de excavaciones arqueológicas, dirigidas por Amalia Poza y José Delgado, durante los años 1999 y 2000. Destacan los hallazgos de una vivienda de la época ibérica en la ladera este del cerro, otra estructura doméstica y un muro de una sola hilada en la zona norte. Junto a este muro apareció una pavimentación, a base de losas calizas, que bien podría ser una calle del poblado.

Además, el poblado contaba con un pozo y un horno, actualmente desaparecidos.

Según Adolfo Floría, es un poblado que, por la cantidad de ceniza que aparece, pudo ser quemado y arrasado por ataques romanos.
De igual manera, Joaquín Sanz manifiesta en un articulo de la revista AVIARA, de fecha 22 de octubre de 2003, que las calles ordenadas por casas de planta rectangular, organizaban su trama urbanística y que por su tamaño, podría estar habitado por unas 200 personas, pertenecientes a la tribu de los ilergetes, con una economía basada en la agricultura y ganadería.
Tenían organizada la división de trabajo  y su cultura era la de los pueblos pre-romanos. Añade el Presidente de CEHIMO, que precisaría una excavación científica y ser protegido, dada su importancia arqueológica y por ser una parte importante de la historia de Binaced.

Cronología: El espectro cronológico, según los materiales aparecidos,  iría desde la primera edad de del hierro hasta el siglo II a. C.

Material cerámico: Aparece mucho material cerámico realizado a mano y en torno, con diversos decorados y pintados en varias tonalidades rojas. Poca presencia de barniz rojo y cerámica campaniense. Destacar el hallazgo de un pequeño pondus troncopiramidal, con agujero de suspensión en la parte frontal, así como una esfera en arcilla cocida.

Material lítico y metálico: Más bien escaso, con varios molinos barquiformes de granito y diferentes fragmentos indeterminados de hierro, así como glandes de plomo y fíbulas de bronce.

Numismática: Se encuentran monedas de las cecas de Bolskan (Huesca), Iltirda (Lérida), Tarraco (Tarragona) y Roma.

En el museo arqueológico CEHIMO  de Monzón, tienen expuestos diversos materiales encontrados en el Poblado de Ripol.
Cerro donde está ubicado el poblado Íbero de Ripol

David y Santi junto a una de las casas excavadas en su día por CEHIMO

Piedra de molino con agujero central de grandes dimensiones


Eugenio Monesma, Director del Programa de TV Aragón "El Secreto de las Piedras", fotografiando el yacimiento



Restos de otra construcción


Santi observa la construcción de una tramada de muro

Uno de los muchos molinos que aparecen por el cerro

Alicia, del grupo de Monesma, hace comentarios sobre una losa tallada que llama la atención por su grosor y tamaño


Daniel, José Luís Montaner (CEHIMO) y Santi, tras una visita al poblado ibérico de Ripol


Foto analógica de 1984 en el que se aprecian piezas de adobes con diversas incisiones del horno del poblado, actualmente desaparecido, (en el museo de CEHIMO conservan algunas de estas piezas)




Foto analógica del año 1984 donde se observan los fragmentos de piedra tallada en forma de cuenco





Vajilla de cerámica campaniense
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, la Comarca y CEHIMO)

Plato de cerámica campaniense
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultura y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)


Vasija globular de cerámica campaniense
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2103, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Tapes de recipientes de cerámica campaniense
(imagen obtenido de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Plato decorado con pintura típica del pueblo ilergete
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Anverso monedas íberas
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Monedas íberas
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Glandes de plomo
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recretiva "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)
Molino y percutor íberos
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Magnífico recipiente de cerámica decorado con pintura, en el que se puede apreciar el nivel de creatividad del  pueblo íbero de Ripol
(imagen obtenida de la exposición arqueológica celebrada en Binaced en el año 2013, organizada por la Asociación Cultural y Recreativa "El Pino", con la colaboración del Ayuntamiento, Comarca y CEHIMO)

Cartel informativo de la época íbera, empleado en la exposición arqueológica realizada en el año 2013 en Binaced

La Arqueopatrulla